Tyreek Hill se presentó en el campo para jugar con los Miami Dolphins contra los Jacksonville Jaguars en el partido inaugural de la temporada regular de la NFL, apenas unas horas después de haber sido arrestado en Florida.
El incidente ocurrió tras un accidente automovilístico cercano al estadio, donde Hill fue detenido en su vehículo. A pesar de esto, continuó y participó en el encuentro entre los Dolphins y los Jaguars.
En la conferencia de prensa posterior al juego, Hill reconoció que había sido detenido por conducir a alta velocidad, pero expresó su preocupación sobre las implicaciones que su situación podría tener si no fuera una figura conocida, aludiendo a los casos de brutalidad policial que afectan a la comunidad afroamericana.
Aseguró que no mostró falta de respeto hacia los agentes y narró que fue «esposado» sin justificación alguna.
