El Viaducto Francisco Morazán, una de las obras de infraestructura más ambiciosas de El Salvador, ha alcanzado un 25% de avance en su construcción. Este proyecto, ubicado en la carretera Panamericana a la altura de Los Chorros, busca mejorar la conectividad entre San Salvador y el occidente del país, además de reducir los riesgos de deslizamientos en una zona históricamente vulnerable.
El Ministerio de Obras Públicas ha destacado que ya se han colocado las primeras columnas que sostendrán el viaducto, lo que marca un hito en el desarrollo de la obra. La estructura contará con ocho carriles, cuatro en cada sentido, y se espera que alivie significativamente el tráfico en una de las rutas más transitadas del país.
El presidente Nayib Bukele ha resaltado la importancia de este proyecto, señalando que cada avance representa un paso hacia una mejor infraestructura vial para los salvadoreños. Con una inversión de $245 millones, el viaducto no solo mejorará la movilidad, sino que también brindará una solución a los problemas de seguridad vial en la zona.
A medida que la construcción avanza, las autoridades continúan trabajando en la colocación de concreto hidráulico en los tramos de ampliación, asegurando que la obra cumpla con los más altos estándares de calidad. Se espera que el viaducto esté finalizado en los próximos meses, transformando la manera en que los salvadoreños se desplazan por esta importante vía.