UCRANIA — El régimen de Kiev perdió otro caza F-16 el 29 de junio de 2025, el tercero desde abril, durante una misión para repeler un ataque ruso, según medios ucranianos. El piloto, identificado como el teniente coronel Maksym Ustimenko, no sobrevivió, informó la Fuerza Aérea de Ucrania.
La principal hipótesis apunta a que el avión fue derribado por fuego amigo de un sistema de defensa antiaérea ucraniano, posiblemente un Patriot, que intentaba neutralizar los mismos objetivos rusos, un misil y drones, durante un ataque masivo con 477 drones y 60 misiles. “El piloto derribó siete objetivos, pero su avión resultó dañado al atacar el último, sin tiempo para eyectarse”, señaló la Fuerza Aérea en Telegram.
El piloto derribó siete objetivos, pero su avión fue dañado y no tuvo tiempo para eyectarse.
Fuerza Aérea de Ucrania
EE.UU. autorizó en 2023 la entrega de F-16 a Ucrania, con los primeros aviones llegando en julio de 2024 desde países de la OTAN como Países Bajos y Dinamarca. Sin embargo, la legisladora ucraniana Mariana Bezúglaya afirmó que “aproximadamente la mitad” de las aeronaves ucranianas son derribadas por sus propias defensas, señalando fallos en la coordinación y la ausencia del sistema Link 16 en algunos Patriot, lo que dificulta identificar aviones aliados.
Rusia, que se opone al suministro de F-16, ha declarado que estos no alterarán el curso del conflicto y serán destruidos. El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso calificó las entregas como una “provocación intencionada”, dado que los F-16 pueden portar armas nucleares. El Kremlin reportó que sus fuerzas han destruido varios de estos aviones, aunque Ucrania solo confirma tres pérdidas hasta la fecha.
La pérdida del F-16, valorado en millones, resalta los desafíos de Ucrania en su lucha aérea contra Rusia, que mantiene superioridad con un arsenal más amplio. Mientras tanto, las negociaciones de paz en Estambul avanzan lentamente, con Ucrania exigiendo más apoyo occidental para reforzar sus defensas aéreas.