Un alto funcionario ucraniano hizo un llamado el lunes, instando a las naciones aliadas de Occidente a permitir que Ucrania utilice las armas proporcionadas para atacar depósitos militares en territorio ruso. Este pedido surge ante las crecientes sospechas de que Irán ha estado enviando misiles balísticos para respaldar los esfuerzos bélicos de Rusia.
Según informaron este fin de semana a The Associated Press dos fuentes cercanas al asunto, Estados Unidos ha alertado a sus socios sobre la posibilidad de que Irán haya entregado misiles balísticos de corto alcance a Rusia en el contexto del conflicto en Ucrania.
A pesar de que los países occidentales que apoyan a Ucrania se han mostrado reticentes a autorizar ataques en suelo ruso, por temor a una escalada del conflicto, el jefe de la oficina presidencial ucraniana, Andrii Yermak, enfatizó que “proteger no significa escalar”. A través de su canal de Telegram, Yermak argumentó que, en respuesta al suministro de misiles por parte de Irán, Ucrania debe tener la capacidad de desmantelar los arsenales donde se almacenan esos misiles utilizando armamento occidental para prevenir el terrorismo.
Desde el inicio del conflicto en febrero de 2022, Rusia ha llevado a cabo bombardeos aéreos devastadores en Ucrania, resultando en la muerte de más de 10,000 civiles, según informes de Naciones Unidas. Estos ataques han afectado gravemente la producción de electricidad en el país.
Sin embargo, Ucrania ha mostrado resistencia y recientemente llevó a cabo una audaz operación en la región rusa de Kursk, mientras trabaja para frenar la ofensiva rusa en Donetsk, al este de Ucrania.
Desde 2022, Rusia ha estado recibiendo drones Shahed de fabricación iraní, y la posibilidad de que se le envíen misiles balísticos iraníes ha generado preocupación entre los gobiernos occidentales, especialmente en un momento en que el presidente Vladímir Putin busca apoyo internacional.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, se pronunció el lunes sobre las acusaciones de misiles iraníes, afirmando que “este tipo de información no siempre es cierta”. No obstante, Peskov destacó la importancia de Irán como socio, mencionando el desarrollo de relaciones comerciales y de cooperación en diversas áreas.
En Teherán, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Nasser Kanaani, rechazó las acusaciones sobre el suministro de armas a Rusia, considerándolas políticamente motivadas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania expresó su “profunda preocupación” por la posibilidad de suministro de armas iraníes a Rusia, instando a Irán a cesar definitivamente estas prácticas para demostrar su compromiso con la paz.
El director de la CIA, William Burns, advirtió el fin de semana en Londres sobre el peligroso fortalecimiento de la cooperación en defensa entre Rusia, China, Irán y Corea del Norte, afirmando que estas relaciones representan una amenaza tanto para Ucrania como para los aliados occidentales en el Medio Oriente.
Además, el Ministerio de Defensa chino anunció la realización de ejercicios navales y aéreos conjuntos con Rusia a partir de este mes. Aunque China no ha suministrado armas directamente a Rusia, se ha convertido en un aliado económico crucial, siendo su principal cliente de petróleo y gas, y también ha proporcionado productos electrónicos y otros artículos de uso civil y militar.