ESTADOS UNIDOS — Mark Zuckerberg, CEO de Meta, ha revelado una ambiciosa estrategia para posicionar a la compañía en la vanguardia de la superinteligencia artificial. El ejecutivo anunció que la empresa invertirá cientos de miles de millones de dólares en infraestructura dedicada a IA, empleando recursos de su exitoso negocio publicitario para financiar la iniciativa[1][4][7].
«Estamos construyendo redes informáticas de varios gigavatios de potencia», afirmó Zuckerberg. La primera de estas redes, Prometheus, estará operativa en 2026; mientras que la futura infraestructura Hyperion alcanzará una capacidad de hasta 5 gigavatios, el equivalente al consumo anual de hasta cuatro millones de hogares en EE. UU.[3][5][6][7].
Meta ha reorganizado todos sus esfuerzos en IA bajo el nuevo Superintelligence Labs, encabezado por Alexandr Wang tras la reciente adquisición del 49% de Scale AI por más de 14.000 millones de dólares. Además, ha fichado a talento clave de OpenAI y Google para acelerar el desarrollo de modelos avanzados y competir con los líderes del sector[1][6][7].
Esta gran inversión responde al avance de competidores como OpenAI, Google y xAI, que también aumentan su gasto en grandes centros de datos y contratación de expertos[2][5]. Meta busca así recuperar terreno, especialmente luego de los resultados inferiores de su modelo Llama 4 respecto a otras propuestas del mercado. Pese a los desafíos, la compañía insiste en liderar la próxima revolución tecnológica de la IA.
“En nuestro esfuerzo por desarrollar superinteligencia, estoy enfocado en construir el equipo más de élite y con mayor concentración de talento de la industria […] y vamos a invertir cientos de miles de millones de dólares en capacidad de cómputo para construirla.”
Mark Zuckerberg
La apuesta de Meta marca un hito en la carrera por la IA general, donde el escalado de datos, energía, talento y poder de cómputo se convierten en los grandes diferenciadores para alcanzar la ansiada superinteligencia artificial.