Apenas 35 días luego de haber perdido la final más extensa de la historia de Roland Garros, donde dejó escapar tres puntos para el título, Jannik Sinner se tomó la revancha frente al mismo oponente, Carlos Alcaraz, y se alzó con el trofeo de Wimbledon por primera vez en su trayectoria. El actual número uno mundial logró revertir un encuentro que empezó con un set en contra y finalmente se llevó la victoria en cuatro sets (4-6; 6-4; 6-4; 6-4).
Además de haber conseguido su cuarto trofeo de Grand Slam, este triunfo marcó otro hito significativo para el tenista italiano: rompió una racha de cinco derrotas seguidas ante el español, de las cuales tres habían sido en finales.
A pesar de sus antecedentes negativos frente a Alcaraz, su oponente más fuerte, Sinner no mostró signos de debilidad en ningún momento del encuentro y, tras perder el primer set, no volvió a permitir que le rompieran el servicio, manteniendo el dominio durante un partido muy igualado que se extendió por 2 horas y 50 minutos.
A diferencia de lo sucedido en París, el joven de 23 años no dejó escapar la ventaja de dos sets que tenía a su favor y, en el cuarto set, selló el partido con su servicio. Con esta victoria, se convirtió en el primer jugador en derrotar a Alcaraz en una final de Grand Slam, ya que este mantenía un récord de 5 triunfos en cinco finales, además de ser el primer italiano en consagrarse como campeón en la categoría de singles en Wimbledon.
Antes de enfrentarse a Alcaraz, Sinner tuvo un arduo camino para llegar a su cuarta final de Grand Slam consecutiva. Pasó las primeras tres rondas sin complicaciones, venciendo 3-0 primero a Nardi, luego a Vukić y finalmente a Martínez.
La primera vez que enfrentó un verdadero desafío fue en octavos de final ante el búlgaro Dimitrov, quien dio la gran sorpresa del torneo al superar al número uno del mundo en los dos primeros sets. El jugador de 34 años estaba cerca de lograr una de las victorias más significativas de su carrera, cuando al inicio del tercer set sufrió una grave lesión en el pectoral que lo obligó a abandonar el encuentro. Así, Sinner logró avanzar a los cuartos de final tras superar una de sus pruebas más difíciles en tiempos recientes.
En esa fase, se encontró con el estadounidense Ben Shelton, quien en el primer set se mantuvo a la par y llevó el juego a un tiebreak, donde finalmente el italiano logró imponerse. A partir de ese momento, Sinner tomó el control del partido y ganó 3-0.
En la semifinal, tuvo que medirse a Novak Djokovic, quien ha sido campeón del torneo en siete ocasiones. Sin embargo, a sus 38 años, el exnúmero uno del mundo nunca pudo alcanzar el ritmo de juego y fue superado con marcadores de 6-3; 6-3; 6-4.
Así, Sinner alcanzó la quinta final de Grand Slam en su trayectoria, en la que no permitió que la ocasión se escapara y celebró como campeón por primera vez en Londres frente a su principal adversario.