En una operación sin precedentes, las autoridades de Guatemala llevaron a cabo más de 100 allanamientos simultáneos en diferentes departamentos del país, logrando la detención de más de 50 personas vinculadas a actividades de extorsión y sicariato. Esta acción forma parte de una estrategia integral para combatir la criminalidad organizada que afecta la seguridad y la tranquilidad de la población.
Las fuerzas de seguridad, en coordinación con el Ministerio Público y la Policía Nacional Civil, planificaron esta operación durante varias semanas, recopilando evidencia y realizando seguimientos a las estructuras criminales. Los allanamientos se realizaron en zonas urbanas y rurales, donde se sospechaba que operaban grupos dedicados a la extorsión a comerciantes, transportistas y ciudadanos comunes.
El ministro de Gobernación destacó que esta acción representa un duro golpe a las redes delictivas, que han generado un clima de miedo y violencia en el país. “Estamos comprometidos con la seguridad de los guatemaltecos y estas acciones demuestran que no habrá impunidad para quienes atenten contra la paz social”, afirmó.
Entre los detenidos se encuentran presuntos cabecillas y operadores logísticos de las bandas criminales, quienes serán procesados judicialmente por delitos relacionados con la extorsión, sicariato, asociación ilícita y otros cargos conexos. Además, se incautaron armas de fuego, municiones, vehículos y documentos que serán clave para futuras investigaciones.
La población ha reaccionado con esperanza ante esta operación, que podría marcar un antes y un después en la lucha contra la delincuencia organizada en Guatemala. Organizaciones civiles y expertos en seguridad han pedido que estas acciones se mantengan y se complementen con políticas de prevención y desarrollo social para atacar las causas profundas de la violencia.
Las autoridades reiteraron que continuarán con operativos similares en todo el país y que fortalecerán la cooperación internacional para desarticular redes transnacionales que operan en la región.
Este operativo es un claro mensaje a los grupos criminales: la justicia está actuando con firmeza para recuperar la seguridad y el bienestar de todos los guatemaltecos.