EL SALVADOR — Un fiscal de la Subdirección de la Criminalidad Organizada testificó contra el exfiscal general Luis Martínez en el Tribunal Tercero de Sentencia de San Salvador, acusándolo de omisión de investigación en casos de corrupción conocidos en 2014, durante su gestión al frente del ministerio público.
El testigo, quien formaba parte de la Unidad de Investigación Financiera (UIF) en 2014, relató que participó en una reunión en el edificio California junto a figuras clave como el exjefe de la División Antinarcóticos de la PNC, Marco Tulio Lima, el exjefe de la UIF, Tobías Menjívar, el exdirector del Centro de Escuchas, Sigfredo Campos Crespo, y el propio Martínez. En la reunión se discutieron temas como una amenaza de muerte del exdiputado Wilber Rivera Monge contra Martínez.
Además, se abordaron escuchas telefónicas que revelaban actos de corrupción vinculados a la exalcaldesa de San Rafael Cedros, Dina Concepción Arévalo Chicas, el exjuez Romeo Aurora Giamattei, y el exalcalde de Ilopango, Salvador Ruano, ya fallecido. Sin embargo, según el fiscal testigo, Martínez no dio seguimiento a estas denuncias, dejando los casos sin investigar.
El testigo afirmó que preguntó a su superior qué se haría con esa información, ya que no correspondía a su jurisdicción, pero nunca recibió respuesta. Los casos solo fueron investigados años después, durante las gestiones de los exfiscales Douglas Meléndez y Raúl Melara, quienes abrieron expedientes y los judicializaron.
Los abogados defensores de Martínez, junto con los de Héctor Francisco Grimaldi y Julio Arriaza, no interrogaron al testigo. Sin embargo, el juez pidió al fiscal que confirmara quién era el fiscal general en ese momento, y el testigo señaló a Luis Martínez. En respuesta, Martínez declaró a periodistas que las acusaciones son solo suposiciones y que los hechos se aclararán en su defensa.
Durante la jornada del martes, la Fiscalía General presentó a cuatro testigos, dos en la mañana y dos en la tarde, para respaldar las acusaciones de omisión de investigación y otros delitos contra Martínez. Este caso refuerza las denuncias sobre la gestión de Martínez, marcada por escándalos de corrupción y falta de acción en casos clave.