En una reciente entrevista, la diputada Claudia Ortiz expresó su preocupación por la propuesta de suprimir la deuda política, calificándola como un intento de centralizar el poder y reducir el pluralismo político. Ortiz criticó la falta de un debate público sobre si los ciudadanos apoyan la eliminación del financiamiento público a los partidos políticos a través de impuestos.
Ortiz destacó que su partido, Vamos, había renunciado anteriormente a la deuda política. Según Cesia Rivas, secretaria general de Vamos, esto se debió a la falta de entrega de documentos por parte del Tribunal Supremo Electoral. Sin embargo, Rivas no aclaró si el partido tenía todos los trámites necesarios, como la personería jurídica, para recibir fondos estatales.
Ortiz también criticó a la Asamblea Legislativa por cambiar la Constitución de manera que consideró “ilegítima”. A pesar de su oposición a la forma en que se está manejando la reforma, Ortiz está de acuerdo con eliminar la deuda política, pero cuestionó la transparencia en el financiamiento privado de los partidos: «Está bien, quitemos la deuda política, pero ¿van a transparentar sus donantes en el financiamiento privado?»
La diputada no reveló si apoyaría la eliminación de la deuda política en una votación legislativa, dejando abierta la incógnita sobre su posición final en el pleno. Esta situación refleja una creciente tensión en el debate sobre la financiación de partidos y la reforma constitucional en El Salvador.
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