EL SALVADOR — El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, anunció la captura de los responsables de los dos homicidios registrados el 1 de septiembre de 2025, reafirmando el compromiso del gobierno con la seguridad pública y la lucha contra la impunidad.
En un mensaje difundido en redes sociales, Villatoro destacó la efectividad del Protocolo de Resolución de Homicidios (PRHO):
Gracias al trabajo de inteligencia, investigaciones y territorio, los asesinatos reportados el 1 de septiembre han sido resueltos.Gustavo Villatoro
Esta acción refleja la coordinación entre la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fiscalía General de la República.
Uno de los casos ocurrió en Acajutla, Sonsonate Oeste, donde un hombre de 45 años fue asesinado con un objeto contundente mientras consumía bebidas alcohólicas. Los sospechosos, Mario Ernesto Mendoza Álvarez y Kevin Monroy Luna, fueron detenidos tras una rápida investigación.
El segundo homicidio tuvo lugar en Santiago de María, Usulután Norte. La víctima, una mujer de 29 años, presentaba heridas y golpes. El presunto responsable, Víctor Ernesto Durán González, de 27 años, fue capturado inmediatamente. Según la PNC, Durán González era la expareja de la víctima, con quien había terminado su relación días antes.
Villatoro subrayó el compromiso del gobierno:
Protegeremos la vida de los salvadoreños y nos aseguraremos de que ningún homicidio quede impune, con los responsables enfrentando décadas en prisión.Gustavo Villatoro
Este enfoque busca mantener la confianza ciudadana en las instituciones.
El 2 de septiembre, la PNC reportó que no se registraron homicidios en el país, un contraste con los eventos del día anterior. Estos casos, ocurridos durante el Mes Cívico, coinciden con la celebración de los 1,000 días sin homicidios en la gestión de Nayib Bukele, un logro que el gobierno destaca en medios nacionales.
A pesar de estos incidentes, la rápida respuesta de las autoridades demuestra la fortaleza de las políticas de seguridad. La captura de los responsables refuerza el mensaje de que en El Salvador no habrá tolerancia para el crimen, consolidando un entorno más seguro para todos.