Zapopan, México – El asesinato de la influencer mexicana Valeria Márquez, ocurrido el 13 de mayo durante una transmisión en vivo en su salón de belleza en Zapopan, Jalisco, ha conmocionado a México y desatado una ola de especulaciones en redes sociales. En el video, captado por miles de seguidores, un hombre disfrazado de repartidor ingresó al establecimiento, confirmó la identidad de la joven de 23 años y, según la narrativa inicial, le disparó, dejando a la audiencia en shock.
Tras el crimen, surgieron múltiples teorías sobre los responsables. Inicialmente, las sospechas apuntaron al exnovio de Valeria, presuntamente vinculado al narcotráfico. Sin embargo, otra hipótesis señaló a Vivian de la Torre, influencer y amiga cercana de la víctima, con quien había tenido un conflicto previo. Usuarios en redes sociales destacaron como sospechoso que Vivian insistiera en que Valeria permaneciera en el salón, mencionando un costoso peluche que le había regalado, lo que llevó a cuestionar sus intenciones.
Ante las acusaciones, Vivian de la Torre negó cualquier implicación en el homicidio, asegurando que quería a Valeria “como una hermana”. Explicó que los regalos caros eran habituales entre ellas y pidió respeto en medio del duelo. Sin embargo, la aparición de un ramo de flores con un mensaje de “perdón” frente al salón añadió un nuevo elemento de misterio al caso, avivando las especulaciones en línea.
La indignación creció cuando, tras el entierro, la tumba de Valeria fue destruida en un acto considerado premeditado y ofensivo, intensificando el impacto del caso en la opinión pública. Pero el giro más inesperado llegó con el testimonio de una testigo, identificada como “Paola” en una entrevista en el canal de YouTube de Mafian, dirigido por el periodista Fabián Pasos. Por temor a represalias, la mujer usó un seudónimo y relató una versión que contradice la narrativa inicial.
Según Paola, quien se encontraba afuera del salón revisando los precios de los servicios, un domiciliario ingresó y preguntó por Valeria. Cuando ella confirmó su identidad, el hombre buscó algo en su mochila, pero fue Erika, una empleada y amiga de Valeria, quien sacó un arma y le disparó tres veces con frialdad. Paola afirmó que huyó tras escuchar un cuarto disparo, sin poder confirmar si fue el repartidor quien lo ejecutó. “Vi a Valeria de lado y con sangre, me asusté y dije ‘esto es real’”, relató, añadiendo que tanto ella como el repartidor abandonaron el lugar por el pánico.
La abogada de Erika ha negado las acusaciones, insistiendo en la inocencia de su clienta. Sin embargo, muchos seguidores han señalado como sospechoso que Erika, en lugar de ayudar a Valeria tras el ataque, corriera a apagar la transmisión en vivo. Este detalle, junto con el testimonio de Paola, ha intensificado las sospechas sobre su posible implicación. Las autoridades de Jalisco continúan investigando, analizando videos y testimonios para esclarecer los hechos en un caso que mantiene en vilo a México.