Santa Ana, El Salvador – La Fiscalía General de la República de El Salvador ordenó la captura de 170 pandilleros, colaboradores y civiles vinculados al Barrio 18, acusados de perpetrar asesinatos y otros delitos graves en la zona occidental del país. El operativo, desplegado en Santa Ana, San Salvador, La Paz, San Miguel y Sonsonate, incluyó 65 allanamientos en viviendas, resultando en la incautación de 39 celulares, tres armas de fuego cortas y un arma calibre 22.
Entre los crímenes atribuidos a los detenidos destaca el asesinato de un hombre dedicado al robo en un área controlada por la pandilla. Según las autoridades, los pandilleros le quitaron la vida utilizando un arma blanca y posteriormente desaparecieron sus restos, dificultando las investigaciones. Otro caso involucró el homicidio de una mujer cuya hija estaba presuntamente relacionada con un miembro de una mara rival, lo que motivó el ataque como represalia.
Las investigaciones también revelaron un tercer asesinato, en el que la víctima fue atacada porque su madre mantenía una relación con un agente policial, un hecho que los pandilleros consideraron una traición. Estos crímenes reflejan la brutalidad con la que el Barrio 18 opera en las zonas bajo su influencia, sembrando temor en las comunidades afectadas.
Además, las autoridades notificaron a 16 pandilleros, actualmente recluidos en distintos centros penales, sobre nuevos cargos por estos delitos. La Fiscalía señaló que los operativos son parte de un esfuerzo continuo para desmantelar las estructuras criminales que han afectado la seguridad en la región, demostrando un compromiso firme con la persecución de los responsables de actos violentos.
Este operativo refuerza las acciones del gobierno salvadoreño para combatir la violencia pandillera, en un contexto donde las políticas de seguridad han logrado avances significativos. Las autoridades continúan procesando a los detenidos, mientras la incautación de armas y dispositivos electrónicos proporciona pistas clave para futuras investigaciones.
