ESTADOS UNIDOS — Boca Juniors debutó en el Mundial de Clubes 2025 con un empate 2-2 frente al Benfica portugués en el Hard Rock Stadium de Miami, en un vibrante encuentro del Grupo C que dejó a la afición xeneize con sensaciones encontradas. Los argentinos, impulsados por una hinchada que transformó el estadio en una extensión de La Bombonera, desaprovecharon una ventaja de dos goles en un partido marcado por la intensidad, errores defensivos y expulsiones.
Desde el arranque, Boca mostró su agresividad, presionando alto y asfixiando al Benfica, que apenas generaba peligro. Al minuto 21, Miguel Merentiel abrió el marcador con un remate al primer palo tras un preciso centro de Lautaro Blanco, quien desbordó con un caño a Samuel Dahl. Seis minutos después, Rodrigo Battaglia amplió la ventaja con un cabezazo, desatando la euforia de los hinchas. Sin embargo, en el tiempo añadido de la primera parte, un penalti cometido por Carlos Palacios permitió a Ángel Di María descontar desde los doce pasos, dando vida al Benfica.
En el segundo tiempo, el partido se volvió trabado, con faltas constantes y pocas ocasiones claras. La expulsión del delantero italiano Andrea Belotti (Benfica) al minuto 70 parecía allanar el camino para Boca, pero un descuido defensivo permitió a Nicolás Otamendi empatar con un potente cabezazo al 84. La situación se complicó aún más para el Xeneize con la roja directa a Jorge Figal en los minutos finales. A pesar del empate, la pasión de la hinchada argentina no decayó, animando hasta el último segundo.
Con este resultado, Boca Juniors y Benfica suman un punto en el Grupo C, quedando por detrás del Bayern Múnich, que goleó 10-0 a Auckland City. El equipo dirigido por Miguel Ángel Russo deberá ajustar detalles defensivos para enfrentar sus próximos compromisos contra Bayern y Auckland City, en un torneo que promete máxima exigencia. La actuación de Merentiel y Blanco, junto a la garra de la afición, dejaron destellos de esperanza para el conjunto argentino en esta competición global.
