SAN PEDRO SULA, HONDURAS — El lunes 30 de junio de 2025, Allan Jonathan Merlo Raudales, de 34 años y miembro de la comunidad LGTBIQ+, fue encontrado sin vida en la colonia Moderna, San Pedro Sula, departamento de Cortés, Honduras. Según la Policía Nacional, el cuerpo, vestido con ropa de mujer, fue hallado a orillas de la calle principal, sin heridas de arma de fuego o blanca, con asfixia como posible causa de muerte.
Agentes policiales acordonaron la escena y aguardaron la llegada de Medicina Forense para realizar la autopsia. Testimonios de vecinos, reportados por medios locales, indicaron que Merlo Raudales, conocido como Alisson, era una persona reservada y sin conflictos. Las autoridades investigan el móvil del crimen y buscan identificar a los responsables.
El cuerpo no presentaba heridas de arma de fuego ni blanca; se maneja la hipótesis de asfixia como causa de muerte.Policía Nacional de Honduras
El asesinato ocurre en un contexto de alta violencia en San Pedro Sula, una de las ciudades más peligrosas del mundo. Organizaciones como el Centro para la Diversidad y la Identidad Sexual (CEDIS) denuncian un aumento en los crímenes de odio contra la comunidad LGTBIQ+, con al menos 10 casos registrados en Cortés desde 2023. En 2025, Honduras reporta un promedio de siete homicidios diarios, según el Observatorio de la Violencia de la UNAH.
La comunidad LGTBIQ+ y activistas han expresado indignación en redes sociales, exigiendo justicia. Este caso se suma a otros crímenes contra la comunidad, como el asesinato de Héctor Simeón Maradiaga en 2022 en el mismo municipio, evidenciando la vulnerabilidad de este grupo en Honduras.