Carlo Ancelotti, a sus 65 años, se convierte en el primer entrenador extranjero en seis décadas en dirigir a la Canarinha. Su llegada busca revitalizar un equipo nacional que ha enfrentado escasos éxitos deportivos en los últimos años y se encuentra desconectado de sus hinchas. La presentación del italiano se llevará a cabo en un gran hotel de Río de Janeiro a las 18H00 GMT, después de su llegada a Brasil el domingo.
Ancelotti, conocido por su éxito en el Real Madrid, donde levantó 15 títulos en seis temporadas y se convirtió en el técnico más laureado de la Liga de Campeones de Europa con cinco trofeos, asumirá por primera vez el mando de una selección nacional. Su contratación se produce dos días después de una emotiva despedida en el Santiago Bernabéu, tras el último partido de la liga española, en el que el Barcelona se coronó campeón.
La Seleção contará con figuras destacadas como Raphinha (Barcelona), Vinícius Junior y Rodrygo, a quienes Ancelotti ya dirigió en Madrid. Vinícius despidió a su antiguo entrenador con una emotiva carta en las redes sociales, agradeciéndole por su apoyo en momentos difíciles.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) llevaba más de dos años deseando la llegada de Ancelotti, buscando poner fin a una racha de resultados decepcionantes. Desde su último título mundial en 2002, Brasil solo ha llegado a las semifinales de la Copa del Mundo una vez en las últimas cinco ediciones, sufriendo una histórica derrota de 7-1 contra Alemania en 2014.
Ancelotti reemplazará a Dorival Júnior, despedido tras una goleada de 4-1 contra Argentina en marzo, en las eliminatorias para el Mundial de 2026. Su primer desafío será en junio, enfrentándose a Ecuador y Paraguay, en partidos cruciales donde Brasil ocupa actualmente el cuarto lugar en la clasificación.
Este lunes, Ancelotti anunciará la lista de convocados, que podría incluir el regreso de Neymar tras más de un año de ausencia por una grave lesión. Neymar, a pesar de su irregular rendimiento reciente, es considerado junto a otros jugadores como Casemiro (Manchester United) y Richarlison (Tottenham), cuyos nombres han sido mencionados en filtraciones de la prensa.
La apatía hacia la Seleção ha crecido entre los aficionados brasileños, que añoran a leyendas como Pelé, Garrincha, Ronaldo, Romário y Ronaldinho. La crisis se ve exacerbada por el éxito actual de Argentina, campeona del mundo y bicampeona de América, liderada por Lionel Messi.
Ancelotti asumirá el cargo en medio de turbulencias en la CBF, que recientemente eligió a su nuevo presidente, Samir Xaud, tras la destitución de su predecesor. Xaud expresó su deseo de que Ancelotti consiga el tan anhelado hexacampeonato mundial, prometiéndole total autonomía en su gestión.
Medios brasileños indican que el entrenador cobrará alrededor de 10 millones de euros anuales (aproximadamente 11,2 millones de dólares) y contará con el apoyo de su cuerpo técnico, incluido su hijo, Davide Ancelotti. Con grandes expectativas, Ancelotti se prepara para un nuevo capítulo en su carrera, con la esperanza de devolver a Brasil a la cima del fútbol mundial.
