Pakistán – Una explosión de una bomba colocada en la carretera impactó a un vehículo que transportaba a agentes encargados de proteger a los trabajadores de salud en una campaña de vacunación contra la polio, en una zona históricamente controlada por los talibanes en el noroeste de Pakistán. Este atentado dejó a seis agentes y tres civiles heridos, según informaron las autoridades.
Según Tahrir Sarfraz, un oficial de policía local, ningún miembro del equipo de vacunación resultó lesionado en el ataque ocurrido en Waziristán del Sur, un distrito de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa.
Hasta el momento, nadie ha asumido la responsabilidad del ataque, que parece haber tenido como objetivo a las fuerzas policiales.
Las campañas de vacunación contra la polio en Pakistán frecuentemente se ven afectadas por actos de violencia. Grupos militantes han atacado a los equipos de vacunación y a los policías encargados de su seguridad, argumentando que estas iniciativas son parte de una conspiración occidental para esterilizar a los niños.
Este ataque ocurrió pocas horas después de que Pakistán lanzara una nueva campaña para inmunizar a 30 millones de niños contra la polio. Desde enero, se han reportado 17 nuevos casos en el país, lo que pone en riesgo años de esfuerzos para erradicar la enfermedad.
Pakistán y su vecino Afganistán son los únicos países donde los contagios de polio no han cesado. La enfermedad, que puede ser mortal o causar parálisis, afecta principalmente a niños menores de cinco años y se contagia a menudo a través de agua contaminada.
