Roman Starovoit, quien hasta hace poco había estado en el cargo de ministro de Transporte en Rusia, fue hallado sin vida el lunes en la periferia de Moscú, según confirmaron autoridades oficiales. El descubrimiento ocurrió dentro de su vehículo personal, en la zona de Odintsovo, y presentaba una lesión de bala que sugiere un posible suicidio, según la portavoz del Comité de Investigación de Rusia, Svetlana Petrenko.
La noticia de la muerte del exministro se dio a conocer poco después de que el Kremlin publicara un decreto oficial que anunciaba su despido. Si bien el documento no especificaba las razones detrás de su cese, el portavoz del presidente, Dmitri Peskov, se apresuró a señalar que no era un caso de “pérdida de confianza”, un término comúnmente utilizado en situaciones de despidos por corrupción o ineficiencia. Sin embargo, la coincidencia temporal con una serie de problemas en los aeropuertos rusos aumentó las especulaciones.
Durante el fin de semana previo a su destitución, los aeropuertos en Moscú y San Petersburgo sufrieron un colapso debido a cancelaciones y prolongadas demoras ocasionadas por ataques de drones de Ucrania. La agencia federal de transporte aéreo, Rosaviatsia, reportó cerca de 2. 000 retrasos y casi 500 cancelaciones en un lapso de tres días. Esto llevó al colapso del sistema ferroviario como alternativa de emergencia, con boletos agotados en todos los servicios entre las dos ciudades.
Starovoit había asumido el cargo de ministro de Transporte en mayo de 2024, después de haber sido gobernador de la región de Kursk durante cinco años. Su gestión se realizó en un entorno cada vez más complicado, caracterizado por sabotajes, explosiones y ataques a las infraestructuras ferroviarias en el contexto del conflicto con Ucrania.
Curiosamente, su sucesor en Kursk, Alexéi Smirnov, fue arrestado en abril bajo acusaciones de corrupción en proyectos de defensa fronteriza. En agosto del 2024, fuerzas ucranianas tomaron el control de parte de esa región, lo que aumentó la presión sobre Starovoit dentro del gobierno nacional.
Para llenar el puesto dejado vacante, el presidente Vladimir Putin nombró temporalmente a Andrei Nikitin, exgobernador de Nóvgorod y actual viceministro de Transporte. Putin indicó que propondrá formalmente su nombramiento ante la Duma Estatal.
La muerte de Starovoit plantea interrogantes sobre la presión interna que se vive en el gabinete ruso en tiempos de combate, así como el coste político y personal que implica ocupar posiciones clave en medio del conflicto con Ucrania.