San Salvador, El Salvador – El ministro de Trabajo, Rolando Castro, anunció la aprobación de un incremento del 12% al salario mínimo, una medida diseñada para apoyar a los trabajadores sin comprometer el tejido productivo del país. Este ajuste, que entrará en vigor el 1 de junio, marca la primera vez en 14 años que el Consejo del Salario Mínimo logra un acuerdo unánime, alineado con la propuesta del presidente Nayib Bukele.
Durante dos semanas de intensas reuniones, las autoridades analizaron la iniciativa enviada por Bukele, priorizando el diálogo para alcanzar un consenso. “Desde que el presidente envió la propuesta, dijimos que íbamos a privilegiar el diálogo. Debíamos sacar un acuerdo por unanimidad”, afirmó Castro. El ministro destacó que el aumento responde a las necesidades de los trabajadores, considerando el impacto en la micro y pequeña empresa, que representa un pilar clave de la economía salvadoreña.
El análisis del incremento tomó en cuenta la crisis económica global, que afecta incluso a El Salvador. “No somos una isla, enfrentamos una tormenta económica complicada como el resto del mundo”, explicó Castro. A pesar de propuestas que sugerían aumentos de hasta un 40%, el gobierno optó por un ajuste moderado para evitar el cierre de empresas. “No nos sirve de nada un incremento desmedido que lleve al colapso del tejido productivo”, señaló el ministro.
El incremento del 12% no solo beneficia a quienes perciben el salario mínimo, sino que tiene un efecto cascada en otros sectores laborales, incluyendo procesos de indemnización, que ahora se calcularán con base en el nuevo salario mínimo. Para garantizar su correcta implementación, el Ministerio de Trabajo supervisará a las empresas, previniendo despidos injustificados o prácticas especulativas que puedan surgir como consecuencia del aumento.
Castro enfatizó el compromiso del gobierno de Bukele con el bienestar de los trabajadores, manteniendo un equilibrio con la estabilidad económica. “Desearía que el salario mínimo fuera de $1,000, pero debemos ajustarnos a la realidad”, afirmó. Las instituciones del Ejecutivo ya están desplegadas en el territorio para evitar alzas especulativas en bienes y servicios, asegurando que el incremento beneficie directamente a los salvadoreños sin generar distorsiones en la economía.
Este ajuste refuerza las políticas del presidente Bukele para mejorar las condiciones de vida en El Salvador, consolidando un enfoque que combina apoyo social con responsabilidad económica. Las verificaciones en empresas continuarán para proteger los derechos laborales y garantizar que el incremento salarial cumpla su propósito de fortalecer el poder adquisitivo de los trabajadores.